Siempre he tenido ganas de tener uno pero se me iba de presupuesto.
Gracias a Maribel por fin lo he conseguido.
Ella propuso un trueque: un bastidor de pie, por un cajón de imprenta.
Dicho y hecho, yo le mandé el cajón y ella este precioso bastidor que como veis queda estupendo con mi mecedora!!!
Por cierto... cuando me compré la mecedora no tenia el blog y no os la habia enseñado!!!
Que envidia Laia, es precioso y con su mecedoras a juego tiene que ser una gozada.
ResponderEliminarBesitos.
Yo también he pensado en comprarme un bastidor como éste, pero te pregunto ¿es práctico? ¿y en el invierno cuando una quiera arrimarse al brasero?? jajaja.
ResponderEliminarPor eso dudo en la hora de invertir en uno.
Un besito.
A mi es que personalmente no me gustan nada los braseros... soy más de mantita... jejejej
ResponderEliminarY a mi me ha resultado más comodo de lo que me esperaba... pensé que sería más molesto pero me siento en mi mecedora y aunque no me recueste luego no me duele la espalda ni nada. Eso sí, es para poner un bordado y no quitarlo hasta terminarlo, porque echas un ratito para montarlo.